27 de noviembre de 2010

Capitulo XVII

Al  otro día de su visita, yo tenía una fiesta, recuerdo  que estuvo TODA la noche mandándome sms, más tierno. Decía que me extrañaba,  que me quería mucho (¿no era que me amaba?)  En ese momento no pensé en eso, estaba idiotizada con ese falso amor que me brindaba.
Era todo tan lindo, parecía un cuento de hadas, él era mi “príncipe azul” que me juraba amor eterno, & yo la princesa que le creía, todo era perfecto, pero todo cuento tiene su fin.
Los días pasaron & volvió a visitarme, ya que hacia como un mes que ni nos veíamos, ni me llamaba, ni me mandaba sms (crédito tenia), ni nada; estaba raro & yo lo notaba.
Lo fui a buscar al colegio, antes de llegar me llamo al celular; extrañaba su voz. Baje del colectivo  & estaba ahí, mirándome; lo salude con un beso en la mejilla & comenzamos a caminar hacia mi casa; en el camino charlamos de cosas sin importancia, extrañaba esas charas estúpidas sin sentido; llegamos a casa, estábamos solo, ¡SOLOS! Prendí  la PC & él se acostó en mi cama, jugamos un rato a tirarnos almohadones (que tarados), luego me a acosté a su lado & comenzamos a besarnos & todo eso… Sus manos por todo mi cuerpo otra vez, eso si que no lo extrañaba para nada. De a ratos me levantaba e iba a la PC, pasaron las horas & él tenía que irse, llamamos a un remis, cuando llegó lo acompañe hasta la puerta (ya era rutina).  Cuando me saludo, lo hizo con un beso en la mejilla, en ese momento mi felicidad desapareció por completo. ¿Por qué siempre tenía que arruinar todo? Siempre haciéndome dudar, siempre manipulándome; tenía ganas de romper todo. ¿Qué  quería de mí? ¿Qué carajo sentía por mí? ¿Qué? & encima de eso, siempre que venía a mi casa borraba los historiales de conversación de su MSN, ¿por qué? ¿Hablaba con otra? Seguro que si, tenía otras, muchas más a las que manipulaba como a mi… Era una basura.
Él llego a su casa, se conecto & me hablo, yo estaba mal, confundida & triste. Él lo notaba & me preguntaba el motivo. Nunca se lo dije, nunca le dije lo que pensaba, ni mis miedos ni NADA; prefería seguir así & no arruinar la “relación” que tenia con él.
Días después comenzó a tener la costumbre de  no contestar los sms & a volver tarde a su casa, nunca decía a donde iba; como hacía antes. ¿Qué pasaba? Si, estaba con ella. Ella, con la que había comenzado a ir a la plaza, a la que le hacía tortas, a la que le prestaba su abrigo cuando tenía frio, a la que visitaba; la que me reemplazaba. & yo no podía hacer nada, ni una escena de celos, no me sentía con el derecho suficiente  como para hacerlo. Comenzó a hablarme de ella, demasiado para mi gusto. Comencé a dudar de su relación de “amigos”, ahí había algo más.

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